Juan de Haro: Rabia en Woodhills
Novela de Terror, Suspense y Acción, auto conclusiva y si ser parte de ninguna serie
Juan de Haro, escritor al que he conocido por primera vez al
leer el libro aquí reseñado, ha sido una muy agradable sorpresa. Empezó a
escribir a los 9 años y lo dejó a los 16 para dedicarse a la carrera de
Informática. Volvió a retomar la escritura a los 35 años, con una experiencia
adquirida que se nota en sus obras. Aparte de “Rabia en Woodhills” ha escrito
varias novelas más, entre las que se hallan
“El retrato de Mary Rose” y “Semillas de codicia”.
“Más les valía no
acercarse demasiado, pensó. Se armó de coraje y se preparó para salir.
-Allá
voy. -Abrió la puerta trasera de la maldita furgoneta, la furgoneta que les
había dejado allí encallados en el peor momento.
-¡Dios
mío, Mark, ten cuidado! -Becka vio a su novio bajar de un salto.
Mark
Sheldon se adentró en la espesura de la noche mientras los árboles le
observaban a su alrededor.
Algo
se movió detrás de él...”
Pamela Hopkins se despierta gritando y sudorosa de una
pesadilla. Es algo que le ocurre continuamente desde que, siendo una niña
pequeña, el perro guardián de una granja le mordió el brazo a través de una
valla cuando iba a acariciarlo. Sin embargo, hoy debe olvidar las pesadillas,
es un día especial.
Junto con su novio Tommy, su amiga del alma Becka y la
pareja de ésta van a acudir a un concierto. Tommy ha conseguido la vieja
furgoneta Volkswagen de sus padres en la que viajarán a un fin de semana de diversión en este verano de
1971. A pesar de que a su autoritario y sobreprotector padre no le gusta nada la
idea, Pam se viste para el concierto de forma algo hippy y todos parten hacia unos días que esperan que
sean inolvidables.
Durante el viaje, y entre caladas de marihuana, ríen,
charlan y sufren el calor del verano. Sin embargo, Tommy se da cuenta de que se
están quedando sin gasolina y no parece haber un lugar donde repostar cerca. Según el
mapa, si se desvían por un camino lateral, conseguirán llegar a la gasolinera
de un pequeño pueblo, la cual está mucho más cerca que la de la carretera principal.
Así que eligen el desvío. Ya volverán al
camino principal con el depósito lleno.
“Con los brazos
dubitativos giró el volante, y la furgoneta amarilla se adentró por una
carretera casualmente señalizada en el mapa que los padres de Tommy habían
usado en sus largos viajes. Una vieja carretera que los fabricantes de mapas
ahora pasaban por alto; una carretera que los desvió de su único objetivo, ir a
un concierto; una carretera...”
Cuando llegan a la gasolinera a través de un camino en un
estado penoso, se dan cuenta de que parece abandonada. Cristales rotos en las
ventanas y una camioneta con las ruedas destrozadas les dan la bienvenida. Tommy
se adentra en el destartalado edificio, un hedor nauseabundo lo recibe al
principio, después el cadáver destrozado de alguien y por último un perro de
tamaño descomunal, desfigurado totalmente y cubierto de cicatrices.
Tommy consigue alcanzar la furgoneta a salvo, pero la bestia
que lo persigue también. Consiguen atropellarlo antes de que destroce totalmente el vehículo, aún así, el perro los persigue lentamente. Deciden dirigirse al pueblo. En un cartel pone que se llama Woodhills y
que tiene 630 habitantes. Sin embargo, las dos primeras cifras están tachadas……
Y al llegar al pueblo los esperan más perros deformes y gigantescos.
El infierno tiene un nombre, y según un cartél, antes tenía 630 habitantes.
"Rabia en Woodhills" es un libro que me ha sorprendido muy, muy
agradablemente. Al principio era una historia corta de un recopilatorio llamado
“Los relatos del miedo”, pero los lectores pidieron más, y así surgió esta
novela.
Si hay algo que abunda en este libro es tensión continua. Lo que iba a ser un fin de semana de música y amor se convierte en una pesadilla
sin descanso. No hay tregua ni para los protagonistas ni para el lector, no se
puede descansar. Si te paras mueres, si no sigues leyendo te quedas con ganas.
“Sus pasos se hundían
en los charcos que comenzaban a formarse a causa de la lluvia. Pero Pam,
perseguida una vez más por su pesadilla, no reparaba en nada que no fuese abrirse
paso a través de los árboles.
No
sabía si era sólo una percepción, pero tenía la sensación de que los gruñidos
de las bestias quedaban atrás. O tal vez fuera su propio entumecimiento que le
impedía escuchar los ladridos con claridad.
Otra
vez no. Es imposible...”
Me ha impresionado la narrativa de un escritor que parece
que lleva 20 años escribiendo libros para grandes editoriales, aunque
desgraciadamente no es así, todavía. La ambientación es magnífica, consigue que
parezca exactamente la misma atmósfera que se recrea en clásicos del cine cómo “La
matanza de Texas”. La desesperación, la urgencia, el agotamiento, todo eso y más
te viene a la cabeza automáticamente.
En fin, recomendado para todo el mundo. Ya he indicado antes
libros para los que no les guste tal o cual temática. Si no te gusta el terror,
éste es uno de los que recomiendo para que te cures. Es un manual de cómo hay
que escribir una historia que no descansa hasta llegar el final casi muerta de
agotamiento. Espero que el autor nos de muchas más alegrías cómo ésta.
Algo malo tiene, por supuesto, cómo todos. En este caso es que
se hace demasiado corto, así que aprovechad sus veloces y rabiosas 254 páginas.
A mí se me han pasado volando, cómo si algo las persiguiera sin descanso.
Muchas gracias!!! :D Se agradece mucho este tipo de iniciativas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias a ti por escribirlo, ha sido un placer leerlo.
EliminarUn saludo.
Lo buscaré, lo leeré y también lo reseñaré.
ResponderEliminarGracias por darme a conocer un nuevo autor.
Un abrazo
Gracias por la oportunidad :D Bienvenida a mi familia... aaah, pero primero te toca leer ;)
EliminarUn saludo.
Que lo disfrutes, el libro se pasa rápido. Esto sí que es un verdadero "Giro al infierno" :)
EliminarOtro abrazo para ti,
Yo conocí a este autor, hace un par de años, "bicheando" y buscando libros cortitos, baratos y que me llamasen la atención y encontré "Los relatos del miedo", me gustó bastante y compré "El retrato de Mary Rose", la cual se nota que es un ensayo de novela de un escritor novel, de ahí el motivo que para mi opinión fuera algo floja. Decidí seguir al autor, pues me gusta el estilo y cuando salió "Rabia en Woodhills" lo compré sin dudar. No he podido leerlo aún, debido a mi larga lista de lectura, pero está dentro de mis siguientes 12 lecturas.
ResponderEliminarUn saludo
A disfrutarlo, a partir de cierto momento es un no parar.
EliminarSaludos.