Brian Lumley: El que habla con los muertos
Novela de terror. Primera parte de la excepcional pentalogía "Crónicas Necrománticas"
Brian Lumley fue militar en la armada, donde ya escribía relatos cortos de terror en sus ratos libres. Cuando abandonó el ejército se dedico a tiempo completo a su pasión por la literatura de terror. Sus primeros éxitos fueron una serie de historias relacionadas con los "Mitos de Cthulhu" de H.P. Lovecraft. Ha ganado varios premios del género pero lo que le trajo la fama fue la serie "Necroscopio" de la que la pentalogía "Crónicas Necrománticas" es sólo una parte.
"Borowitz cerró los ojos. Aunque él era un hombre
duro, no podía mirar aquello. Ya lo había visto antes, y lo recordaba demasiado
bien.
Pasaron unos instantes: Mikhail en su rincón,
temblando; Andrei al otro lado del cuarto, de espaldas a la pantalla, y su
superior con los ojos fuertemente cerrados, acurrucado en su asiento. Y
entonces...
El grito que llegó por el altavoz era de los que
destrozan los nervios más resistentes; de los que, a no dudarlo, pueden
levantar a los muertos. Estaba lleno de horror, de una monstruosa sabiduría,
lleno de... indignación. Sí, indignación..., el grito de una fiera herida que
clamaba venganza. Y enseguida, el caos."
Harry Keogh siempre ha tenido facilidad para aprender toda clase de cosas, incluso las que nadie le ha enseñado. Cuando era niño parecía estar distraído continuamente, pero siempre respondía de forma correcta, incluso por encima del nivel de sus profesores.
Harry tiene la habilidad de comunicarse con los muertos, los cuales en su soledad agradecen la relación con alguien que quiere hablar con ellos y aprender de ellos, de sus experiencias en vida y de sus pensamientos en la muerte.
Mientras tanto, en la Unión Soviética, Boris Dragosani trabaja para una oscura rama del ejército soviético. Su misión es la de interrogador, pero uno muy especial. Saca información por la fuerza a los muertos mediante toda clase de torturas y profanaciones a sus restos, y es muy bueno en ello. Boris tiene un maestro muy especial que le ha enseñado los retorcidos secretos de la más oscura Nigromancia.
Cuando era joven, Borís descubrió por accidente en uno de los más recónditos lugares de un bosque en su Rumanía natal algo para lo que no estaba preparado. Una voz en su cabeza le habla y mediante hábiles promesas convence al joven Boris para que le ayude. Esa voz proviene de una tumba olvidada en los alrededores, donde yace encerrado para toda la eternidad Thibor Ferenczy, el cual, por su maldad sin límites fue condenado a yacer enterrado con un cuchillo en el pecho y rodeado por cadenas de plata. Hasta que Dragosani lo descubrió.
"Boris se dio cuenta entonces de que estaba consciente y de que la voz que oía en su cabeza era real. Y su malignidad era como el tacto viscoso de un sapo, el salto de los grillos en la oscuridad, el odioso «tic-tac» de un reloj, que parece hablar contigo en medio de la noche, burlándose de tus miedos y tu insomnio. Aunque era mucho peor que eso, estaba seguro, pero no tenía las palabras, o el conocimiento, o la experiencia como para describirla."
Cuando Harry crece se casa con el amor de su infancia. Después, su capacidad de hablar con los muertos y su búsqueda de respuestas le llevará a trabajar para una rama secreta de los servicios secretos que se encarga de los asuntos paranormales. Mientras tanto, en Rumanía, Boris Dragosani se dispone a cumplir la promesa que le hizo al monstruo que es su mentor desde hace ya muchos años. Va a liberarlo de su condena eterna.
"El que habla con los muertos" es una novela de terror con mayúsculas. El autor ha logrado unos ambientes con una época y unos personajes a la perfección. A pesar de que es un libro que fue escrito y transcurre durante la guerra fría no creo que haya sido superado desde entonces por ningún otro en su temática de muertos y vampiros. Los primeros están sólos, siguen siendo conscientes de ellos mismos pero no pueden ni siquiera hablarse mutuamente. La habilidad de Harry es una bendición para ellos, mientras que la de Boris es una pesadilla de la que no pueden escapar si no es cumpliendo las exigencias del nigromante. La muerte ha dejado de ser una liberación para ellos.
Es evidente que su estancia en las fuerzas armadas de su país influyó en el escritor a la hora de tratar la temática cómo un enfrentamiento entre el Este y el Oeste. En una trama de historias que van transcurriendo por su cuenta y en distintas épocas para confluir hábilmente hasta que los hechos transcurren a la par.
Los personajes están muy bien definidos, tanto los vivos cómo los muertos y los que están en un estado intermedio. El tratamiento que el escritor le da aquí al mito del vampiro deja de lado a esos No Muertos con dudas sobre si lo que hacen está bien ó mal. Que piensan que su condición es un castigo por sus actos en vida. No, aquí el vampiro es maldad pura con una refinada e infernal inteligencia. Todo contenido en un cuerpo que vive por siempre y con habilidades que superan en mucho y de forma horrenda a cualquier humano con habilidades especiales.
Mención especial a la atmósfera durante todo el libro, excepto en algunas ocasiones esporádicas, mientras leía tenía la sensación de que todos los colores de lo que iba leyendo eran muy apagados. La luz de sol no llega a iluminar completamente la narración y el ambiente es opresivo a la vez que fascinante. La oscuridad en lo profundo del bosque se puede trasladar perfectamente a una instalación soviética ó a la ciudad donde Harry crece desde niño a adulto.
"La criatura enterrada permaneció un instante en silencio mientras Dragosani, ansioso, esperaba. Tuvo la sensación de que la tierra había vuelto a temblar, aunque casi imperceptiblemente, bajo sus pies. Pero sin duda sólo era su imaginación, el saber que un ser antiguo y malvado, corrompido y no-muerto yacía allí, enterrado. A su espalda el árbol parecía sólido como una roca, y Dragosani no sospechó que su tronco estaba ahuecado por la carcoma. Pero lo estaba, y algo comenzó a filtrarse desde la tierra al carcomido tronco."
Si no habéis leído este libro os lo recomiendo encarecidamente. No encontrareis un libro de terror sobre muertos y vampiros mejor que éste en todos sus aspectos, por eso lo he dejado para el final en esta trilogía del 1 de noviembre. Si lo leéis y os gusta el tema, lo pasareis de miedo mientras disfrutáis cómo nunca durante sus 424 páginas.
La vieja y querida literatura fantástica. Brian Lumley nos ofrece una galería de seres con apetitos monstruosos que no son muy humanos :)). Lo dicho tendré que incursionar más en el género.
ResponderEliminarUn abrazo.
Jeje. Pués sí, Yo mismo, que leo un montón de este género desde hace años, no conozco am uchos autores que se mencionan como famosos. Pero descubrir a Brandon Sanderson y a Brent Weeks ha sido una gozada. En fin, que lo que sale en este libro sí que es un VAMPIRO, no un vampiro ó un Vampiro: todas las letras en mayúscula.
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